Los colores se pueden englobar en tres grupos: Sólidos, particolores y exóticos.
Dentro de los sólidos encontramos los más habituales: naranja, rojo, blanco, negro, sable... (las puntas negras se pueden dar en cualquier color). Es decir, todos los unicolores o más apropiadamente, todos los colores EXENTOS de blanco.
Porque, aunque suene paradójico... en este grupo también se engloban los marcados con "fuego" o TAN, o sea: negro & tan, azul & tan, chocolate & tan, que, a pesar de tener dos colores, se consideran sólidos.
En el grupo de los parti-colores están todos los colores marcados con blanco. Según la cantidad de blanco, se denominan de una u otra manera. Así encontramos los Mismark, Piebalds, Irish, etc. Y en este grupo también se incluyen los marcados con TAN que además llevan blanco, o sea tricolores.
El grupo de los exóticos es un "cajón desastre" donde están todos los colores "raros". Aquí vemos a los azules, merles, atigrados, chocolates, beavers (isabelas).
El blanco puro es muy difícil de conseguir, sobre todo manteniendo el tipo "osito" que vemos hoy en día. Normalmente son de tipo menos evolucionado. El blanco tiene unas características genéticas muy definidas y de carácter dominante, como por ejemplo: falta de subpelo, orejas grandes, hueso fino, hocicos largos y temperamento nervioso. Actualmente, hay criadores que trabajan en programas exclusivos para el color blanco y están consiguiendo ejemplares con características de "osito", pero manteniendo la pureza del color. En el caso del pomerania, en las exposiciones caninas la distribución de CAC y CACIB no se hace por grupos de colores, sino que todos los colores compiten juntos y se otorga un único CAC y CACIB por sexo.